lunes, 26 de abril de 2010

Plumas agitadas

Imbuida por el erotismo de tu verbo



avanza el alba.


Sábanas mojadas


quedan ocultas


entre pilas de gemidos


arrojados al tiempo.


Corrientes de besos


estremecen las plumas agitadas


en circuitos profanos


teñidos de miel.


Tallistas de rocas


moldean imágenes movidas


del agua diurna.


Gorgoritean ángeles rotos,


parecen crujir …


vidrios ensalivados germinan chorros de granas


que bordan la ruta crepuscular.


Danza un pañuelo…


Casilda

Forastera...

Debí caer antes,

debí caer siempre

pero mi cuerpo se sostuvo

con hilos de flores.

Mi alma flota aun

constante en la niebla

y aunque mi risa llora

y mis ojos solfean

me se próxima al suelo agreste

donde algún orfebre

recobrará aquel brillo

para adornar otras frentes…


Debí caer antes,

debí caer siempre

pero, mi afán de mensajera

me sostuvo en el aire.

Plácida recorro todavía los desiertos

donde ningún oasis logró

calmar mis angustias con sus gotas

y aunque desfilan por la arena dromedarios

floto erguida sobre ellos

perdida entre espejismos ...


Cae pronto hoja seca,

cae pronto niña triste,

antes que la oruga sea mariposa

condenada a volar eternamente.

Deja que el sonido de la brisa

arrastre tu armonía,

no llores el lienzo blanco,

que la luna en su mengua

sabrá acunarte entre estrellas

y te arropará de nubes

mientras aletargas sentencias.



Cae pronto niña triste,

compréndete forastera…






Casilda

viernes, 23 de abril de 2010

América errante

Invadida de fuerzas mágicas
la América errante se dibuja…
Flotan entre las gentes, los hijos del sol¡



Abramos en capullos, elfos y ninfas.
Integremos los sueños de ritmos incansables,
de caminos infinitos que andan al encuentro.
Tejamos las arenas del desierto
construyamos redes luminosas
coloreemos sus rostros, los nuestros…



Que ardan las húmedas hojas
al reclamar la ausencia.
Reguemos nuestros sudores,
vivamos nuestras presencias
cubramos nuestras cumbres con mantos eternos
colmemos los abismos con los hombres nuevos.




Hagamos el pie de un cirio teñido,
en coros de trinos, lancemos voces al cielo
que las pasiones copulen y despierten los suelos,
que paran nuestras siluetas aves muy blancas en vuelo
mensajeras, buscadoras ansiosas de manos,
de dedos
constructoras de torres capaces de juntar reinos.



Borremos las sogas, escribamos los besos
escuchemos los cantos, los cantos del pueblo
extendamos los brazos, prolonguemos los riegos
desvelemos secretos
cosechemos paisajes, integremos los sueños…
que América hermana no yerre,
que América errante se quede...






Casilda